Difuntos colegiales, sindicalistas zombies

EL PASADO (O NO)

 

En aquel tiempo, la vida colegial había caído al barro sin remisión. Los colegiados habían abandonado una institución a la que estaban obligados a pertenecer por Ley para poder trabajar y con la que mantenían una mera relación comercial. Pagaban unas cuotas porque no tenían más remedio que hacerlo y no esperaban recibir nada más a cambio, salvo quizás algún curso de formación por aquí o alguna subvención para algún evento por allá. Y en medio de todo, la desidia, auspiciada por los que dirigían los Colegios, que poco o nada hacían por estimular o favorecer la participación de los colegiados.

Las convocatorias de elecciones se hacían sabiendo que sólo habría una candidatura, pues no había suficientes colegiados que quisieran comprometerse y presentarse al proceso electoral. Si en algún momento los dirigentes percibían que algún grupo se había estado interesando más de la cuenta por la vida colegial, blindaban su mandato a golpe de estatutos o de procesos electorales ficticios disfrazados de democráticos Continuar leyendo “Difuntos colegiales, sindicalistas zombies”