Noviembre y diciembre de 2016
En nuestro post de ayer, os contábamos las desventuras que sufren las enfermeras madrileñas desde hace tiempo y que se han recrudecido con la toma del Colegio de Enfermería de Madrid (CODEM), por una nueva Junta de Gobierno surgida de un inexistente proceso electoral. Hoy seguimos con lo acontecido en las últimas semanas.
Hace unos pocos días, el 23 de noviembre, el Colegio publicó en su web, con algunas modificaciones respecto del anterior, el Texto definitivo del Proyecto de Reglamento de Régimen Interno sobre Organización y Funcionamiento de la Junta General del Colegio Oficial de Enfermería de Madrid y al mismo tiempo el Proyecto de modificación parcial del artículo 15 de los Estatutos particulares del Colegio Oficial de Enfermería de Madrid, que es lo que se escondía en realidad tras el proyecto. Los colegiados madrileños tienen 15 días hábiles para presentar alegaciones (los compañeros de AME, se lo facilitan aquí); o sea, hasta el 16 de diciembre.
Una semana después, en el tablón de anuncios de la 2ª planta y en la web del CODEM (en esta ocasión no ha habido correo electrónico informativo, ni aparece en el boletín semanal que envían a todos los colegiados), han publicado la Convocatoria y Reglas de funcionamiento de Junta General Ordinaria de 2016 (si os interesa leerlas, entrad pronto y descargadlas, porque quizá no permanezcan mucho tiempo a disposición de los interesados). La verdad, tenemos que reconocer que ambos documentos son sorprendentes.
Es evidente que todo se ha hecho con una planificación milimétrica, ya que el plazo para presentar alegaciones a la modificación de estatutos termina el 16 de diciembre, viernes, y la Junta General de Colegiados, cuya Convocatoria se publicó el 30 de noviembre con un Orden del Día que ya incluía, como último punto, la “aprobación”, en su caso, del Proyecto de modificación parcial del artículo 15 de los Estatutos del CODEM”, se ha convocado para el día 20, martes; ¿va a resolver la Junta de Gobierno todas alegaciones presentadas en la jornada del lunes 19 de diciembre?, ¿tan seguros están de que las van a desestimar todas, que ya han publicado el texto definitivo en la web y lo han incluido en el Orden del día de la Junta General? Resulta raro…
Esta imagen es de la convocatoria:
De esta convocatoria nos llaman la atención muchas cosas, algunas de las cuales creemos que merecen un análisis pormenorizado:
- El lugar elegido para la reunión de los colegiados, resulta francamente sorprendente. Llamadnos mal pensados pero, por un momento, hemos llegado a creer que su cercanía a la Cuesta de Santo Domingo (en cuyo nº6 está la sede central de ya sabéis qué), donde tantas enfermeras trabajan cada día, podría haber sido determinante en la elección.
- Según la web del cine Capitol de Madrid, este cuenta con tres salas con diferente aforo. Dos de ellas (las salas 2 y 3), pueden albergar a poco más de 200 personas cada una, por lo que no creemos que sean las elegidas para la Junta de Colegiados, ya que el salón de actos del CODEM tiene, probablemente, una capacidad mayor. La sala 1, tiene un aforo de 1.357 personas y, suponemos, que será en esta donde se celebre la Junta. Y el caso es que una sala con esa capacidad parece innecesaria, si tenemos en cuenta que en las juntas de colegiados de los años previos el número de asistentes nunca pasaba de, aproximadamente, 350 colegiados. ¿Qué le hace pensar a la Junta de Gobierno del CODEM que este año (y con ese horario), la asistencia se va a multiplicar casi por cuatro? Aunque fuesen ciertos los rumores (que, dada la trayectoria de la Junta de Gobierno, nosotros no creemos) de que en los últimos meses se ha colegiado en Madrid, presuntamente, a numerosos liberados sindicales de otras provincias…, más de 1.300 asistentes, parecen muchos.
- El horario podría hacer pensar que los convocantes no conocen los turnos de trabajo de los convocados, pero como eso no es creíble (y además, se asemeja mucho al horario en que convocaron en 2015, solo que 30 minutos más tarde para dificultar un poquito más la asistencia), no queda sino asumir que la hora elegida (12:30 h en segunda convocatoria) es intencionada. El turno de mañana no podrá asistir y el de tarde, sólo podrá quedarse un rato, porque tendrán que salir pitando para llegar al trabajo. Y esto nos lleva al siguiente punto: el Orden del día .
- La estructura del Orden día, es muy curiosa porque no hay turno de Ruegos y Preguntas como es habitual, sino que estas se han incluido en los puntos 3 y 4, de modo que, probablemente, cada uno de esos puntos se alargará y los temas potencialmente más conflictivos, se tratarán (en realidad, se votarán, porque en esos no hay derecho a preguntas) a una hora en la que las enfermeras del turno de tarde que hayan podido asistir, habrán tenido que marcharse y sólo se encontrarán presentes aquellas que hayan decidido emplear su día libre en tratar de mejorar el colegio y su democracia, o hayan pedido un día libre expresamente para asistir a la reunión con esa misma finalidad. Lógicamente, esto no afectará a los liberados del SATSE que acudan a la Junta (que seguro que este año serán todos), porque esa actividad formará parte, probablemente obligatoria, de su trabajo del día 20 de diciembre.
- Sorprendentemente, en el Orden del Día de este año, no está contemplada la votación, a favor o en contra, del mantenimiento de la deuda con el CGE, que se viene aprobando en las Juntas de los últimos años. Como tiene por costumbre, el CODEM no ha informado a los colegiados de posibles cambios en este tema. Pero, aunque las relaciones entre el Colegio de Madrid y el Consejo, hayan mejorado tanto como demuestra la imagen que hay a continuación (extraída de la propia web del CODEM) , la Junta de Gobierno haría bien en no olvidar que en diciembre de 2015, y a instancias de la Junta que entonces gobernaba el colegio, la Junta General (órgano soberano del Colegio) decidió mantener (e incrementar) la deuda con el CGE. Que nosotros sepamos, no hay ningún pronunciamiento judicial que obligue al CODEM a pagar definitivamente su deuda, así que, de momento, debe ser el mismo órgano colegial el que en su caso revoque, o no, esa decisión.
23 de noviembre de 2016 Presentación en el CODEM del Congreso Internacional de Enfermería 2017 de Barcelona
Y, si la convocatoria da tanto de sí…, no queremos ni contaros lo que nos provoca el otro documento, el que recoge las Reglas de Funcionamiento de la Junta General Ordinaria de 2016. Son 19 reglas, dictadas por los colegas de la Junta de Gobierno del CODEM que, básicamente, le dicen a las enfermeras de Madrid que a la Junta de 2016 asiste quien ellos quieren, se habla sólo de lo que ellos quieren, por supuesto se vota del modo que ellos quieren y no se puede grabar (ni vídeo, ni audio) porque ellos no quieren. Así que nos vamos a limitar a poner unas instantáneas de algunas de esas Reglas y nos vamos a abstener de comentarlas porque, francamente, nos parece que no es necesario. Si queréis leerlas completas, tenéis el enlace más arriba.
CONCLUSIÓN
La indignante conclusión que extraemos tras todos estos meses, en los que además de lo que estaba ocurriendo en Madrid, hemos vivido lo que pasaba en Asturias e incluso en las elecciones al Pleno del CGE, es que el modus operandi de los colegios profesionales (nos referimos a los de enfermería, que son los que conocemos y sufrimos), según está legislado actualmente en España, deja completamente desprotegidos a los colegiados. Las leyes españolas, que nos obligan a pertenecer a un colegio profesional, si queremos trabajar legalmente, nos dejan indefensos cuando nos ponemos enfrente de las personas que detentan el poder en las Juntas de Gobierno. Ese despropósito de aunar lo público con lo privado en las organizaciones colegiales (no olvidemos que los colegios son Corporaciones de Derecho Público), hace que ni la ley estatal de colegios profesionales, ni las leyes autonómicas que regulan el tema, respondan a las necesidades de los colegiados, cuando estos descubren que hay algo que no funciona en su colegio profesional. Las Comisiones de Recursos previstas en la ley, que las define como “no sometidas a instrucción jerárquica del Órgano de Gobierno del Colegio”, son nombradas por las mismas juntas a las que pondrían en apuros si aceptaran los recursos de los colegiados críticos. Las consejerías a las que se supone que se puede recurrir en los casos en que hay legislación autonómica, terminan remitiendo a los colegiados a esas mismas comisiones de recursos. Este círculo perverso finalmente les obliga, como único camino, a acudir a los tribunales para tratar de que se respeten sus derechos.
Y, una vez que deciden acudir a los tribunales, ya pueden armarse de paciencia…, y de dinero, porque el que la justicia ponga orden y claridad en los asuntos, es lentísimo y carísimo, básicamente porque, como colegiado que eres, pagas a los abogados de las dos partes.
¿De verdad los más de 1.300.000 colegiados obligados españoles no merecemos una ley sensata, que garantice el funcionamiento verdaderamente democrático de los colegios profesionales que recoge la Constitución Española?
Quizá algún día lleguemos a verla pero, mientras tanto, las enfermeras madrileñas harían bien en ponerse las pilas y acudir en masa a la Junta General porque en caso contrario el próximo día 20, y para los siguientes cinco años, les van a birlar la posibilidad de tener un colegio democrático, participativo y que realmente las represente.